Puerta Nº 7 Ni rastro de Humanidad Carol abrió los ojos. La única luz venía del reloj de la mesilla, los dígitos marcaban las tres y media. Se giró dispuesta a seguir durmiendo, pero tenía la vejiga a punto de explotar. Intentó concentrarse para olvidar la presión, no quería salir del calorcito de la cama, […]